13 febrero, 2014
Matriz Ventaja Competitiva del BCG
Las dimensiones de esta matriz del BCG son:
- Alternativas para crear ventajas competitivas sostenibles, es decir, el número de fuentes potenciales de diferenciación (muchas / pocas)
- Tamaño de la ventaja competitiva sostenible, es decir, la importancia de la ventaja competitiva sostenible (débil / elevada)
Podemos engloblar los diferentes sectores o industrias en cada uno de los cuatro cuadrantes, que corresponde una
situación competitiva concreta la cual demanda un enfoque estratégico específico.
FRAGMENTADA: los participantes disponen de muchas
alternativas de diferenciación, pero son fácilmente igualables e,
inmediatamente, deben crear una ventaja nueva. Posiblemente es un sector en el que existen pocas
barreras de entrada y de salida, los participantes se desgastan mucho, ya que
las ventajas son temporales y débiles. Ejemplo de este tipo de industria serían las
tiendas de línea marrón y blanca, que basan su diferenciación únicamente en promociones y publicidad, los restaurantes, los
servicios de reparación y mantenimiento de automóviles… Muchas ideas, infinitas posibilidades, pero
siempre uno cerca del otro. El tamaño no aporta economías significativas y una
cuota de mercado dominante no se traduce necesariamente en costes más bajos. Es un sector en el que existen numerosos competidores
pequeños, coexistiendo con rentabilidades muy diversas. La cuota de
mercado no tiene ningún valor. En la mayoría de los casos la mejor estrategia
consiste en intentar desplazarse hacia una actividad de
volumen o de especialización.
ESPECIALIZADA: Es una industria, un sector, novedoso, cerca de la innovación, de la ruptura, las alternativas de diferenciación son amplias. Ejemplos tenemos en los negocios de la nueva economía
(telecomunicaciones, informática) donde las fuentes de diferenciación son
numerosas y susceptibles de conferir una ventaja competitiva defendible
importante. Los
productos tienen las cualidades distintivas importantes para el comprador, el
cual acepta pagar un precio superior al practicado por los competidores
directos. En este tipo de situación, el efecto del tamaño no confiere ninguna
ventaja decisiva; es el valor de la diferenciación o de la especialización lo
que cuenta y lo que determina el potencial de rentabilidad. La cuota de mercado
total tiene poco valor; es la cuota de mercado en un segmento o en un nicho
específico lo que es crítico, incluso si este nicho es de escasa importancia.
VOLUMEN/CONCENTRACIÓN: Las formas de diferenciarse son pocas,
pero la ventaja competitiva obtenida, si consigues un gran volumen de producción
es muy importante –gracias a las economías de escala (efecto tamaño y/o
experiencia) se consigue reducir los costes-. La rentabilidad está estrechamente unida a la
cuota de mercado, una elevada cuota relativa de mercado es tú ¡tesoro! Ejemplos
típicos son, la industria pesada o la de las infraestructuras.
PARALIZADO/ESTANCAMIENTO: Las empresas del mercado no tienen
ni ventaja competitiva ni alternativa para crearlas. Es un sector de bajo
atractivo. Al igual que en las actividades de volumen, existen pocas maneras de
diferenciarse de los competidores pero, a diferencia de las actividades de
volumen, la experiencia acumulada no constituye una ventaja competitiva, al
contrario, son a veces las recién llegadas, las que habiendo invertido más
recientemente, tienen las herramientas de producción más eficaces, el último en
invertir puede tener los costes de explotación más bajos debido a la tecnología.
¿Solución? dotar al producto de un elemento de diferenciación importante para el
comprador potencial, es decir, buscar la ventaja competitiva sostenible, migrar al cuadrante de especialización.
Nota: Si vienes buscando la matriz clásica del BCG, ¡lo siento!, el BCG tiene desarrolladas diversas matrices con mayor o menor popularidad, como la matriz de gestión del valor de una empresa
Etiquetas: estrategia, matriz, ventajas competitivas