"Los empleados deben lavarse las manos antes de regresar al trabajo"
El manual del empleado de esta empresa debe ser descomunal, a diferencia del manual del empleado de Nordstrom, que se imprime en una simple tarjeta, con una única norma: "use el mejor juicio en todas las situaciones". Ambas empresas están en el mismo sector. Nordstrom, se caracteriza por un servicio excepcional al cliente basado en dos pilares: la atención al detalle y el alto nivel de autonomía de sus empleados.
Cuando una empresa siente la necesidad de recordar a sus empleados algo tan básico como lavarse las manos tras usar el baño, podría estar mostrando una falta de confianza en el criterio y la responsabilidad de su personal. Esto sugiere que los empleados de esta empresa necesitan mucha supervisión, lo que podría implicar una cultura organizacional donde la autonomía y la autodisciplina no son valores centrales.
Además, la decisión de colocar este cartel en los baños que comparten empleados y clientes puede generar en los clientes una sensación inquietante. Si es necesario recordar algo tan elemental, podría dar la impresión de que la empresa duda de la higiene de sus empleados, por eso tiene que recordárselo explícitamente. Esto puede afectar la percepción del cliente sobre la calidad del servicio o producto ofrecido, erosionando la confianza en la empresa.
En resumen, mientras que las normas elementales pueden ser necesarias para mantener un mínimo de calidad y seguridad en ciertos contextos, su exceso podría indicar una debilidad en la cultura organizacional, o unos mandos muy enfocados en el control o la microgestión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario